EN PUNTO

Néstor Camarillo Medina y Mario Riestra Piña, presidentes del PRI y el PAN, respectivamente, siguen dando espectáculo a los consumidores de información política. Los dirigentes partidistas subieron de tono en sus acusaciones y trasladaron la pelea a las redes sociales, con expresiones grabadas en video en las que se atacaron el uno al otro. Y eso que fueron aliados y cómplices en el pasado proceso electoral. O eso se pensaba.

Riestra fue el primero en publicar un video para tundir a Camarillo. Acompañado de Genoveva Huerta Villegas, secretaria general del Comité Directivo Estatal blanquiazul, minimizó el anuncio adelantado de la ruptura de la alianza opositora para los comicios intermedios de 2027 que hizo el priista y dijo que su partido, el tricolor, está por extinguirse. Y de la misma forma que lo hicieron los dinosaurios.

Riestra, además, le dijo a Camarillo que la senaduría que hoy ostenta se la debe a los votos que obtuvo del PAN.

El líder del PRI no tardó en armar un video para subirlo a sus redes sociales.

“Mario Riestra, eres un malagradecido. Quiero ser muy claro y responder de manera directa a Mario Riestra, sus señalamientos y sus aberraciones. Mi problema no es con tu militancia ni con tu partido, es contigo que pactas con Morena”, lanzó, duro y a la cabeza del panista.

Luego pegó donde más duele: “En lo que va de tu dirigencia no has tocado ni con el pétalo de una rosa al gobierno del estado. Esa oposición de mentiras no es realidad”.

Ambos personajes convivieron como “amigos” apenas el domingo, en plena jornada electoral, en el municipio de Venustiano Carranza.

Pero, la verdad es que el repentino divorcio no sorprende.

Néstor Camarillo y Mario Riestra han sido enemigos y rivales desde antes del proceso electoral de 2024, cuando ambos compitieron tras bambalinas por la candidatura del bloque opositor a la presidencia municipal de Puebla.

Riestra la ganó entonces. Y hoy se ve, por la pasión desbordada de Camarillo, que la herida nunca sanó. O sí, pero dejó cicatriz.

Si por circunstancias no visibles en este momento las dirigencias nacionales del PAN y el PRI deciden retomar su alianza en el futuro, no podrá ser con estos dos presidentes. Nadie les creerá.

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Es cuestión de horas para que la Central de Abasto cuente con un módulo de vigilancia de la Guardia Nacional, una medida largamente esperada por los comerciantes que buscan mayor seguridad en la zona. Y vaya que la necesitan. La instalación de este módulo es parte de una estrategia del gobierno estatal para reforzar la vigilancia en el principal punto de comercio de la región, respondiendo así a una de las principales demandas de los locatarios.

Ante la próxima visita del gobernador Alejandro Armenta Mier, los comerciantes le expresarán su agradecimiento por esta acción concreta. Sin embargo, también aprovecharán la ocasión para insistir en otra petición clave: la salida de Luis Pinto Medel de la Secretaría General de la Central de Abasto.

No sería extraño que, de cara a los bodegueros, Pinto Medel intente atribuirse méritos ajenos, pero muchos recuerdan que en meses pasados presuntamente pidió “cooperaciones” de varios miles de pesos bajo el pretexto de que ese dinero serviría para la construcción del módulo. Ahora que las autoridades han asumido su responsabilidad, los locatarios no dudarán en exhibirlo si pretende sacar provecho de esta obra y hasta abucheado puede salir.

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La partida de Raymundo Atanacio Luna de la dirección del DIF Estatal no generó reacciones relevantes entre los integrantes del “círculo rojo” del estado, como sí lo hizo el arribo de Juan Carlos Valdez Zayas en su lugar.

Valdez Zayas era considerado el más fuerte candidato a ocupar la Auditoría Superior del Estado (ASE) una vez que comenzara el proceso para poner titular. Con este personaje dentro del DIF queda claro que no irá a ese lugar.

Eso fue lo que provocó reacciones ayer, principalmente entre aquellos tiradores a la ASE que se consideraban imposibilitados ante la presunta ventaja que llevaba el nuevo director del DIF.

Hoy el camino para arribar a la ASE ha quedado libre, al menos en apariencia.