El monóxido de carbono provoca síntomas como náuseas, mareos y vómitos, pero también somnolencia, lo que puede llevar a la muerte sin que la persona lo perciba.
El titular de la Secretaría de Salud, Adrián Medina Amarillas, explicó que dicha variante es más contagiosa, pero provoca síntomas similares a la influenza tipo A.