Localjueves, 2 de julio de 2020
Entre la pasión del trabajo y sus padres
Sarahí decidió proteger a su familia y tuvo que rechazar un contrato que tenía años solicitando con el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) “mis padres son personas de los sectores de riesgo y no pude arriesgarme a contagiarlos”.