Actualmente los costos del producto van desde los 15 y hasta los 20 pesos en los mercados de abasto, mientras que en los supermercados suben hasta 25 o 30 pesos
Los consumos de energía se incrementan entre un cinco y un 10 por ciento, y sus costos son asumidos por el empresario, sin que esto se vea reflejado en el precio del producto final