Desde 2012 se realiza esta ofrenda con motivo del Día de Muertos, fecha que coincide con la campaña de la Unesco para combatir la impunidad de los crímenes contra periodistas.
Autoridades municipales hicieron un llamado a padres de familia, escuelas y a organizadores de fiestas, a no apoyar la gestión de fiestas clandestinas en casas para adolescentes.