Aumenta adicción a casinos en el estado tras pandemia
El Instituto de Psiquiatría advierte que se trata de una conducta adictiva peor que la adicción a una droga
Christian Galarza
Apenas en 2013 la ludopatía fue reconocida como una enfermedad adictiva, apuntó.
CUANDO LA TOLERANCIA NO ES SUFICIENTE
“Va creando tolerancia, nunca es suficiente, por eso se considera una adicción, porque hay un descontrol en el sistema nervioso por ver la realidad y fantasías que empiezan a originar las personas que entran en esta conducta; pierden la capacidad de decidir lo que es correcto y lo que no, aparecen pensamientos mágicos”, detalló.
“Ésta es una de las enfermedades que más rápido puede llevar a una persona a pensar en el suicidio. Cuando ya se acabó todo, cuando ya deben todo, entonces aparecen pensamientos desesperantes”.
ALGORITMOS EN APPS, LO MÁS TERRIBLE
“Ahora con la pandemia cerraron algunos días los casinos, creció el número de personas (...), se están empezando a acercar jóvenes de 20, 18 años, en quienes ya se disparó la conducta adictiva”, expresó.
EL CASO DE “JAVIER”
“Javier” admitió que la gran cantidad de casinos en Mexicali agravan la situación de las personas con dicha adicción, además de crear más ludópatas.
“Empecé apostando poco al principio, pero la adrenalina de ganar un premio o imaginar un acumulado, me llevó a empezar apuestas más grandes. Conforme fueron pasando los años ya las apuestas chicas no me llamaban la atención. Fue creciendo esa necesidad de apostar más y más y más”, expresó.
“No salíamos de jodidos, siempre endeudados y nunca alcanzaba el dinero para nada. Me ausenté de mi casa. Cuando tuve mi primer hijo no estuve presente porque nada más llegaba de trabajar, me bañaba y al casino”. Constantemente le mentía a sus padres y a su esposa sobre en qué empleaba su tiempo.
“Me decía (la esposa) que no estaba bien, que como podía preferir a una máquina que a mi propia familia. Yo estaba cegado, decía ‘yo trabajo, yo me lo merezco, es mi premio por trabajar’. En esa terquedad estaba cegado por el vicio, yo no me daba cuenta que estaba derrochando el patrimonio de mis hijos, que estaba descuidando a mi esposa”, externó.
“Una vez perdí una suma de dinero muy fuerte, entonces entré en una crisis donde me quería quitar la vida, ¿cómo podía ser posible que yo no pudiera controlar eso? (...), no era dinero mío, era dinero que me habían prestado con intereses, que aún después de 7 u 8 años todavía sigo pagando”, relató.
“Javier” comentó que estaba en Las Vegas cuando eso ocurrió. Al tener los pensamientos suicidas le llamó a Eutiquio Pasos para pedir su ayuda. “Le dije que ya me quería suicidar porque ya no podía con tanta presión. No nada más le debía a esa persona, le debía a amigos, a clientes míos en Calexico que me prestaron dinero porque nos conocemos de muchos años y le dije que ya no podía más”, narró.
“APOSTAR ME FASCINA”
“Javier” señaló que la presencia de más de 15 casinos en Mexicali es una agravante para las personas que padecen esta adicción, ya que representa una tentación para ellos.