Del pasado al presente: los frentes
Así como Trump se expresa de los mexicanos, Putin se expresa de los ucranianos, Netanyahu de los palestinos, a cual más de los tres, criminales, de actos y de hechos, de lesa humanidad, lo que para Mussolini, Hitler y Stalin era el lenguaje sobrehumanamente inhumano.
Así como el Estado-Yo Claudia, de la calma a la cabeza fría, dice que Trump no invadirá a México, Putin no invadirá a Europa, Andrew F. March, en “¿Un derecho a existir?” cuestiona el derecho existir en los Estados-nación en relación con la población de los seres humanos en X Estado-nación, “dado que los estados se basan en la violencia y la expulsión, su existencia está siempre ligada a espinosas cuestiones de justicia”: “Las demandas de reconocer el &-quot, derecho de un Estado a existir", resuenan desde las páginas de opinión hasta las salas de los comités del Congreso estadounidense.
Esta demanda se encuentra con mayor frecuencia en el contexto de Israel y el contexto de sus guerras con los palestinos y otras fuerzas regionales.
La fuerza retórica de la pregunta es obvia. Si Israel enfrenta un desafío a su propio " derecho a existir" por parte de sus enemigos, entonces las críticas a sus acciones militares deben mantenerse moderadas y con reservas. Este contexto también implica la premisa de que los Estados existentes tienen un presunto derecho a existir, o que negar el derecho a existir del Estado X o Y es moralmente repugnante porque no implica la disolución jurídica de un Estado, sino la destrucción de sus habitantes”.
En consecuencia, la posición, la situación y la condición humana en Medio Oriente, Putin bombardea el espacio de Ucrania y Netanyahu el de la Franja de Gaza; la Comunidad Internacional, la Unión Europea, la OTAN y la ONU, en el mundo de las sombras espectrales, se desembocan las palabras en las bocas con las babas de la tregua en la guerra con la paz sepulcral, otra vez, Nunca Más.
Hanna Arendt: “Antes de que los líderes de masas tomen el poder de ajustar la realidad a sus mentiras, su propaganda está marcada por su extremo desprecio por los hechos, como tales, porque en su opinión los hechos dependen enteramente del poder del hombre que puede fabricarlos”.
La cita textual de Hanna Arendt, del pasado al presente se relaciona a la cita de Andrew F. March, y lo que está, de y por medio, es el complejo industrial militar contra el complejo industrial humano, de lo convencional a lo nuclear, la negociación y la disuasión, la solución final, anticipada y pausada, la guerra contra la población civil y ciudadana, sean los presidentes, los señores de la guerra y los líderes de masas con la marcha sobre Roma de Mussolini y el Fascismo, la noche de los cuchillos largos de Hitler y el nazismo y Stalin con las purgas criminales stalinianas, las bombas nucleares capitalistas de Truman sobre Hiroshima y Nagasaki imperiales, repartiéndose USA y la Unión Soviética el mundo de las sombras espectrales con el hueco del culo de la guerra fría hasta que cae el Muro de Berlín y la Unión Soviética, y no, el Homo Sovieticus con el Zar Imperial del Putin nuclear.
Si en el mundo de las sombras espectrales, el estado de cosas están así en los Estados-nación con el derecho a existir y coexistir sin el Derecho de Estado y los Derechos Humanos, el Derecho Internacional Humanitario no detienen a Putin y a Netanyahu, el conflicto internacional multipolar seguirá en la incertidumbre y la perplejidad con la tregua criminal del Estado Sionista de Israel y la tregua mediática de la realidad-real politik con la operación militar especial de la Federación de Rusia desde el Kremlin a Kiev y a la Casa Blanca donde Trump se encuentra sentado en el sillón con unos palillos picándole el fundillo en la Oficina Oval que es el escusado del retrete Made in USA de la America Firts-Make Great Again, evacuando las tormentas de mierda, lodo y sangre, esperando su turno imperial el Xi Jin Ping de la China comunista-consumista y capitalista, de lujo y funeral, de vigilancia digital, de regreso al 1984 Orwelliano con el vigilar y el castigar panóptico Foucaultiano de los uigures carcelarios con los neomedievales de la República Islámica de Irán y los Talibanes en Afganistán con el palo del limosnero Obradorciano y la fascia de cera del Estado-Yo Claudia en México con el narcosicariato, Trump y Putin lo que decidan sobre Ucrania y lo que Putin y Jinping sobre Taiwán, el derecho a existir o sobrevivir o morir o desaparecer tienen relación en lo que Hanna Arendt, Andrew F. March y Slavoj Zizek cita de Giorgio Agamben que “el pensamiento es el valor de la desesperanza”: “una intuición que resulta especialmente pertinente en nuestro momento histórico, cuando incluso los diagnósticos más pesimistas acostumbran a terminar aludiendo a alguna esperanzadora versión de la proverbial luz al final del túnel.
El auténtico valor no consiste en imaginar una alternativa, sino en aceptar las consecuencias del hecho de que no hay ninguna alternativa claramente perceptible.
El sueño de una alternativa es señal de cobardía teórica: funciona como un fetiche que nos impide reflexionar a fondo sobre el punto muerto de la situación en que nos encontramos.
En resumen, la postura realmente valiente consiste en admitir que es probable que la luz al final del túnel sea la de un tren que se acerca en dirección contraria, el tren Maya o el tren de la Casa Blanca o el del Kremlin.