Un proyecto en el que convergen arte urbano, ciencia y responsabilidad climática, ha conseguido bajar hasta diez grados la temperatura del suelo, mediante el uso de pinturas biodegradables
En puertos como Celestún, San Felipe y Río Lagartos, algunas especies han comenzado a escasear debido a la sobreexplotación y la pesca furtiva. Ante la poca vigilancia del Estado, las pescadoras se organizan para proteger esos espacios marinos