Abuelitos llevan a cuestas pesadas losas emocionales
Llegan a la Procuraduría del Adulto Mayor cargando cada uno su propia “cruz”, sufren incomprensiones de la propia familia y hasta agresiones de los hijos; “hace falta que nos escuchen”, dicen
Llegan a la Procuraduría del Adulto Mayor cargando cada uno su propia “cruz”, sufren incomprensiones de la propia familia y hasta agresiones de los hijos; “hace falta que nos escuchen”, dicen