En México los médicos aprenden a suturar heridas, leer radiografías y detener hemorragias, pero casi nunca a pronunciar las palabras que parten vidas: “su familiar ha muerto”. ¿Cómo se capacita a una persona para dar noticias que nadie quiere escuchar?
El fiscal general de Justicia del Estado informó desde las instalaciones del Servicio Médico Forense que las víctimas están siendo identificadas por sus familiares