Gracias a la innovación médica, diversas partes del cuerpo pueden ser trasplantadas a excepción del cerebro, debido a la complejidad que requiere conectarlo con la médula espinal
Richard Norris empezó su carrera como tenista cuando iba a Harvard, y tras negarse a que le amputaran las piernas por sobrevivir al Titanic, logró ganar una medalla en los Juegos Olímpicos